jueves, 1 de mayo de 2014

time out

No es malo necesitar de vez en cuando un "tiempo muerto" en tu vida y poder descansar de todo. Pero no nos engañemos, aunque esa desconexión durase minutos, horas o semanas, los problemas no se iban a solucionar de esa manera.
Y es que a veces se necesita un menos hablar y más actuar, ¿sabéis? Menos te quieros y más detalles. Pero también se necesita algo de mejor suerte, de dejar de caer en supuestos males de ojo que nos echa un ser superior. Que está claro que la vida es puta, pero es que nosotros nos la complicamos más aún, callándonos todo aquello que nos atormenta.
No nos atrevemos a decir lo que se nos pasa por nuestra cabecita alocada, esas pequeñas tonterías absurdas que, al igual que una minúscula bola de nieve en un día cualquiera de cualquier invierno, se va haciendo poco a poco más grande hasta que termina arrasando con todo lo que pilla a su paso.

Y en eso me estoy convirtiendo yo, en una gran bola de nieve formada por todas y cada una de sus pequeñas preocupaciones y que va a acabar arrasando con todo y todos a los que tiene a su alrededor.